DEMOCRACIA; PROBLEMÀTICA CONSTANTE


Marco Antonio Figueroa Quinto

"No soy pesimista. Soy un optimista bien informado."Antonio Gala

La influencia de Ricardo Flores Magón, Francisco I Madero y Jorge Cuesta respectoa nuestro pensamiento democrático con enriquecimiento de las ideas de Herodoto, Platón, Cicerón, Hobbes, Locke, Montesquieu, Rousseau, Tocquevile, Engels, Stuart Mill y Lincoln entre otros, no aleja incertidumbre y desconfianza que existe entre nosotros respecto a nuestro régimen de vida, si entendemos a la democracia como un sistema de gobierno en el cual los gobernantes son elegidos por los ciudadanos mediante votación, asì como su concepción etimológica de demos: pueblo y cratos: poder, que se refleja en el poder que surge del pueblo, por el pueblo y para el pueblo, la que no es tan simple como parece. De manera coloquial podríamos decir, que bastaría con realizar elecciones para que un gobierno y una sociedad posean este valor, cuestión que se va complicando no solo por perversión, ambición o servilismo, sino por las cuestiones que cada sociedad establece para efectuar dichas contiendas, donde se incluyen o excluyen a determinados habitantes por ciertos requisitos establecidos, casi siempre por los hombres que ocupan el poder, que si bien es cierto, muchas veces no son los mismos, quienes llegan –por enajenación, convencimiento o tranquilidad- aceptan todo por lo que antes protestaban.


Para tener derecho al voto en nuestro país son necesario cubrir ciertos requisitos, las que son cuestionables desde muchos puntos de vista, hasta antes del año de 1953 las mujeres no podían ejercer tal derecho ¡claro que eso no estaba bien! Actualmente se debe llegar a la edad de 18 años, registrarse y con ello se obtiene la ciudadanía (garantizada por nuestra carta magna)


Jóvenes capaces, maduros y conscientes de su realidad, muchas veces con un equilibrio mayor que adultos en estado de decrepitud, a los que nada les limita están impedidos para ejercer este privilegio, pero eso si, ser causa de sanción, castigo o sentencia de tal sistema; otra incongruencia.


De igual manera vemos que de los tres poderes, solo dos son considerados para ser electos, privilegiando al poder judicial sobre el legislativo y ejecutivo, quizá con fundamentos, los que no son siempre concuerdan con intereses de la mayoría, sino con el de reducido grupo de personas, los que “iluminados” deciden por todos. Desgraciadamente no todos los ciudadanos están representados en esta forma de gobierno, las mayorías integradas por indígenas, campesinos, obreros y artesanos no afiliados a grupo alguno, nunca estarán representados, la mente ambiciosa y maquiavélica de la clase en el poder pone barreras infranqueables para estos, principalmente en el renglón económico, abanderando con sus rapacerías grupos (partidos políticos) de izquierda que “defenderán” el bolsillo de pobre y humildes, los que nunca verán a sus explotadores como sus abanderados.


Ante esta incertidumbre democrática, el pueblo mexicanos solo expresa “trataré de sufragar por los menos malos”, total que cualquiera que llegue a ostentar el poder se olvida de ideales y proyectos mucho más los responsables del poder judicial que ningún compromiso tienen solo con uno, el ejecutivo; por eso se acentúa la injusticia y la desigualdad, viviendo de la explotación de los siempre humillados y vilipendiados: El pueblo.


La democracia, pese a tener en la operatividad errores y omisiones, se considera el mejor camino para alcanzar la igualdad, la que probablemente se alcance en la muerte ¡Estamos!