LO INCIERTO DE LA DEMOCRACIA Y EL IEV


Marco Antonio Figueroa Quinto

Cuando la lucha de un hombre comienza dentro de sí, ese hombre vale algo. Robert Brownin
En la actualidad los gobiernos presumen y ponderan el término democracia, cualquier régimen que se aparte de tal forma de convivencia humana es criticado y censurado. Pareciese ser que al utilizar este concepto se llega a ideales óptimos de convivencia como serian: libertad, igualdad, justicia, tolerancia y solidaridad, lo que no siempre sucede. Más aún cuando el órgano rector de tales elecciones, no solo en nuestra entidad es duramente cuestionada por la parcialidad de sus integrantes. En esta ocasión haremos algunas precisiones sobre este concepto, que desde la antigüedad despertó comentarios, no siempre favorables.


El amor a la vida, la libertad y la razón permitieron el surgimiento de la democracia entre los griegos, una democracia que excluía mujeres, menores, esclavos y extranjeros, haciendo de este ejercicio un apartado masculino. En la antigüedad, el padre de la historia Herodoto narra que Ótanes encabezó una revuelta contra los magos –que en ese entonces dirigían al Estado-, solicitando que la dirigencia del Estado se pusiera en manos de todos los persas, ya que el gobierno de un solo hombre era perniciosos, en cambio, el gobierno del pueblo tiene, de entrada, el nombre más hermosos del mundo: isonomía (la utopía antes de Moro), surgiendo oposición de parte de Megabizo, quien originalmente también se oponía al gobierno de los magos, desechaba conceder el poder al pueblo, argumentando que no había nada más necio e insolente que una muchedumbre inepta, sugiriendo el gobierno a personas de mas valía, de igual manera la participación de Darío quien complementó, si bien es cierto que un grupo de valiosos es mejor que todo el pueblo, superior régimen sería el de un gobernante único con el hombre de más valía (obviamente hablaba de èl).


La anterior narrativa del “padre de la historia” nos hace ver las peripecias que el hombre ha sorteada para llegar casi al punto de partida, ahora en los inicios del siglo XXI se maneja la idea de Megabizo, donde dueños y quienes controlan las cuestionados, (carisimas para el pueblo) y amafiados partidos políticos, se encargaban de designar a potenciales representantes del legislativo y ejecutivo, que avalados por los que sustituirán, quedan comprometidos y pagar el favor por la designación correspondiendo –si se gana- a mostrar beneplácito en el futuro con similar nombramiento. En si, una mafia, en que solo se rotan los distintos cargos, puestos o direcciones, total son “los hombres y mujeres de mayor valía”.


A esta forma de concebir la democracia se une dispendiosa idea de establecer un órgano para preparar, elaborar y calificar el proceso de elección, con una cúpula de “notables” recomendados por los susodichos partidos políticos, los que a futuro recibirán vergonzante paga, la incondicionalidad y manejo fraudulento de resultados, lo que hace a este mecanismo un dispendio total. Hasta el momento en nuestra entidad todos los partidos políticos se quejan, pero todos de una manera u otra participan en dicha corrupción, la que enardece a las mayorías, que espertufactos siguen soportando tanto cinismo y desvergüenza lo que debe terminar por siempre, el hecho de que se desgarren la ropa en mira de una elección transparente nadie se las cree, solo desean prebendas o canonjías ¡Desvergonzados!.


Sabemos que existen tres tipos de gobiernos: el republicano, el monárquico y el despótico, el primero es donde una parte del pueblo tiene el poder soberano, sobre el segundo es donde gobierna uno solo, pero con sujeción a leyes fijas y preestablecidas; y el último donde el soberano gobierna según su voluntad, lo anterior se conoce como naturaleza de cada gobierno, y que nosotros como mexicanos hemos adaptado, adecuado y manipulado. Pareciese que con la pretendida democracia en nuestro paìs, se opta por un gobierno republicano, que en la práctica se transforma en una monarquía que deriva en un gobierno despótico, nadie en su sano juicio metería la manos al fuego por alguno de nuestros políticos, todavía no llega el o la que cambiará esta manera de pensar, ser y vivir, claro que hay en estas tierras veracruzanas chispazos o destellos de dignidad, seriedad y fortaleza entre noveles políticos, mas bien dicho algunas damas que incursionan con luz propia en acciones políticas, lo que demuestra que no todo esta podrido.


Efectivamente, la mayoría de los veracruzanos nos aprestamos a participar en la venidera contienda electoral, donde se renovará nuestra Cámara de diputados y el ejecutivo de todos los municipios, los que por estar màs cercano a nosotros reviste un interés especial, por ello consideramos que consejeros y directivos del Instituto Veracruzano Electoral (IEV), tendrán que comportarse a la altura de la honradez y honestidad que se requiere, ya que la Alianza de Organizaciones Democráticas Independientes (alodi) a travès de sus miembros redoblarán vigilancia, ya que conocen carencias y excesos que hay en dicho organismo, el que seguirá siendo cuestionado por la falta de escrúpulos de algunos de ellos. ¡Oh democracia, cuantas mentiras se dicen en tu nombre! ¡Estamos!