2011 AÑO DE PARTICIPACIÓN DE LA POBLACIÓN EN LA SOLUCIÓN A LA PROBLEMÁTICA DE LA BASURA EN ESTA CIUDAD CAPITAL Y DE LA ENTIDAD VERACRUZANA

Por Marco Antonio Figueroa Quinto

-PRIMERA PARTE-



* Hemos iniciado los trámites necesarios para traer recursos internacionales
* Recurrimos a las autoridades legislativas y ejecutivas de la entidad para coadyuvar
* Esperamos que Xalapa sea primer municipio en arribar a la modernidad ambiental

Hemos insistido durante muchos años en mejorar las condiciones ambientales del entorno xalapeño, el que necesariamente repercutiría -como experiencia- en valor paradigmático para los demás municipios de nuestra entidad, acciones que se han visto muchas veces frenadas por autoridades obtusas y retrogradas, las que no ven más que sus mezquinos intereses y mantienen nuestros proyectos olvidados, igual que los mantos freáticos, arroyos y ríos, que poco a poco son focos de infección para toda la población, principalmente por no resolver la problemática que genera la basura: material de desecho, residuos industriales, sobras de comida, plásticos, cartón, papeles, trapos viejos, trozos de cosas rotas, llantas, aceite quemado, detergentes, material de curación; inmundicia, suciedad y especialmente la que se recoge barriendo, mucho de este material es reciclable, otros en cambio son altamente contaminantes y nocivos para nuestra salud y vida. Ante esta panorámica seguiremos insistiendo hasta el cansancio sobre los beneficios que podría generar la Planta Incineradora de Basura con Recuperación Energéticas (PIBRE), las que funcionan en metrópolis de países del primer mundo, mientras en nuestro entorno seguimos contaminando tierra, aire y aguas con los obsoletos “rellenos sanitarios”, los que seguramente dejarán pingues ganancias a sus promotores, que utilizando argumentos sin sustentos (solo ponderan el costo de tal recurso) nos mantienen en un retraso sanitario de muchos años. Independientemente de lo anterior es necesario redoblar esfuerzos en la limpieza y cuidado de nuestro entorno, acción que debe ser permanente, continua, controlada y evaluada, ya que entre sus “benefactores” por lo regular subyacen siempre algo más, pues de todos es sabido que muchos se han hecho millonarios con el negocio de la basura, lo que nos hace ver que no es un asunto muy sucio. Al sesionar el cabildo xalapeño actual este primero de enero del presente y por acuerdo unánime, con fundamento en el Artículo Veintisiete fracción primera de la Ley Orgánica del Municipio Libre, se distribuye la Comisión Edilicia de Limpia Pública; Al regidor Aníbal Pacheco, los que conjuntamente –con todas las fuerzas vivas de nuestro municipio- deberían de avocarse a implementar un programa viable que resolviese el problema que representa la basura, el que no se da en forma lineal sino geométrica y que es muy difícil de abordar, tanto que las estrategias implementadas se han convirtiendo en un soberano fracaso. La anterior afirmación parte de las experiencias enriquecedoras ejercidas por muchos, los que a ensayo y error se han dado cuenta lo que funciona o no, específicamente nos referimos a los contenedores; depósitos de basura cuyo uso no es estrategia adecuada, ya que nuestra idiosincrasia nos hace indolentes, abusivos y comodinos, ya que en lugar de mantener dentro del hogar la basura doméstica acumulada, para sacarla en los momentos en que se anuncia el paso de carro recolector se prefiere saturar estos sitios, los que se convierten en focos de infección, generadores de alimañas, roedores e inclusive gusanos (como les sucedió a los habitantes de la Unidad Habitacional “Jardines de Xalapa”), conducta que por lo regular es imitada, rompiendo con esquemas y acciones encaminadas al embellecimiento y limpieza de nuestro entorno, de igual manera se soslayan acciones de la sociedad civil que por su contundencia y consistencia, obtienen más logros que las políticas implementadas por las autoridades. A través de muchos años hemos observado acciones de personas e instituciones que contribuyen diariamente con su esfuerzo y empeño a mantener pequeños y grandes espacios libre de la contaminación e inmundicia, para ellos sin haberse implementado un mecanismo de estímulos y reconocimientos ni las gracias se les dan, sin darnos cuenta que tales conductas propician que otros con similares características y mística social se interesen por imitar estos desempeños, lo que sin duda repercutirá entre las nuevas generaciones para generar hombres y mujeres conscientes de esta problemática, de la que todos saldremos ganando, así mismo sancionar fuertemente a los opuestos; personas sin conciencia social, violadores de los principios elementales del derecho, salud y convivencia para terminar de una vez con este problema. Algo importante que no debemos olvidar es la difusión de buenas y contundentes estrategias funcionales para abatir la contaminación de nuestro medio ambiente, reforzando la información que se da por los medios masivos de comunicación, escuchando el sentir de aquellos que saben y conocen y no por aparentar hacer algo se encaprichen en mantener ideas inoperantes, que por lo obsoleto de sus resultados fueron abandonadas en trienios anteriores. ¡Estamos! (Continuará) alodi_13@hotmail.com